Te nos han llevado
lejos
los monstruos
que temíamos.
Te nos han robado
de la vida, de los sueños
de tu sonrisa, de la nuestra.
Nos dueles.
nos faltas.
Nos apuñala la vida,
tu muerte.
Ya no estás,
pero estás
Siempre
valiente,
con nosotras,
tus hermanas.
Toda la vida nuestra
para que haya justicia en la tuya.
Nos duele el corazón
helado, rasgado, aniquilado,
Yerto.
Dame tus manos,
sigo tu camino,
sigo tus pasos.
No permitimos
que te nos hayan quitado.
Te hago hueco
aquí dentro,
de por siempre.
Hermana.